Con el fin de aprovechar la singularidad de este emplazamiento, la vivienda está formada por una pieza blanca estratégicamente quebrada que dirige las vistas de las diferentes estancias hacia todas las visuales de interés de la parcela, con el fin de generar espacios de interés e impactantes, en cada una de sus fachadas.
La vivienda se apoya sobre un basamento de piedra que la ancla al terreno.
El acceso se realiza por la parte más baja de la parcela, a través de una escalinata, de manera que la vivienda queda en la parte más alta, apoyada sobre un basamento de piedra integrado en el terreno, orientado a norte y combinando planos abocinados de piedra con grandes vidrios. Cuenta con una terraza que se abre al jardín de acceso, de vegetación típica mediterránea, de pinos, cítricos y olivos, con la Bahía de la Granadella como fondo del paisaje.
La terraza sur está rematada por una piscina infinity, longitudinal y quebrada que recae sobre el acantilado de la Cala Ambolo. Esta visual queda enmarcada por una gran fachada de vidrio.
Piscina infinita
La terraza de la zona delantera está formada por una gran plataforma y una piscina “infinity” longitudinal y quebrada que recae sobre la Cala Ambolo. Esta orientación queda enmarcada gracias a una gran fachada de vidrio. Con el fin de liberar el espacio de elementos estructurales que entorpecieran las agradables vistas sobre el mar, la carpintería empleada en la división del vidrio es estructural. Las terrazas se protegen con grandes voladizos metálicos.
Diseño interior
El interior se trata como un espacio continuo y fluido, donde desde cualquier punto se pueden obtener distintas visuales del exterior. La doble altura del salón dota a la casa de mayor escala y espectacularidad. En la planta baja se ubican las zonas de día, mientras que los dormitorios se sitúan en la planta primera, unidos por una terraza corrida que recae sobre la piscina. La Empresa intervino en la ejecución de albañilería y todos los acabados.