NOMAD HOTEL Y SPA ALTEA

El proyecto supuso un reto técnico y arquitectónico, al tratarse de la continuación de una obra ya iniciada, y que además debía respetar la volumetría de las antiguas viviendas, pese a tratarse de una edificación completamente nueva. Esta condición exigió un alto grado de precisión constructiva y sensibilidad con el entorno urbano.

Inspirado en las artesanías tradicionales, se apostó por un enfoque de minimalismo cálido, donde la piedra, el ladrillo, el barro, los azulejos recuperados y las maderas reutilizadas aportan textura y autenticidad. Los revestimientos de cal y la iluminación LED se combinan con el agua y la luz natural para generar una atmósfera envolvente. En los interiores, una paleta de tonos arena da vida a ambientes con identidad. El hotel ofrece una zona de spa con piscina, jacuzzi y gimnasio, además de un restaurante y zonas exteriores de relax. Un lugar que vuelve a la vida, donde diseño, bienestar y naturaleza se funden en perfecta armonía.